Entre las nubes

No soy amigo de escribir sobre temas comerciales, me invitan a eventos y los reseño en mi Twitter y, de vez en cuando, en mi Facebook. Esta semana me hicieron una invitación muy especial, estuve encaramado en Dinner in the Sky para una promoción comercial del Ron Zacapa. Más allá de las delicias que nos dieron y de la historia de ese ron (que debo decir me sorprendió por lo bien contada) la experiencia fue realmente única.

La grúa era una armatroste, si mi memoria no me falla, de 240 toneladas que nos subió 50 metros sobre el Parque de la 93. Para que se hagan una idea, estábamos casi a la misma altura de los últimos pisos de Capital Tower, las torres negras de la séptima con 100 donde queda el Banco Santander. La vista era majestuosa, Bogotá en su máximo esplendor.

A lo lejos y cubiertas de bruma se veían las torres del centro, las que todos vemos camino a trabajar, más cerca estaba la obra de la vía a La Calera y Atlantis, al fondo, si agudizaba la vista se veían las escarpadas montañas de los tugurios de Ciudad Bolívar. Al otro lado, se veía el norte, las Colinas de Suba y para algunos por fin se descubría que detrás de esos montículos también había ciudad. Vimos aviones salir de El Dorado, escuchamos la gente chismorrear después de una jornada de trabajo.

Al bajar una sensación de plenitud, conocimos gente divertida, sentimos el viento helado que baja de la montaña y nos dejamos maravillar por un viaje largo y único.