domingo, 2 de septiembre de 2012

El que piensa, pierde

El que piensa pierde, y mas si lo piensa mucho. Aceptar ser homosexual no es fácil, aun cuando la mayor parte de la sociedad es respetuosa en el tema y las manifestaciones de segregación hacia los homosexuales aunque existen son cada vez mas escazas. Considero que todos los "enclosetados" deben tener al menos una razón de peso para no salir "y gritar a los cuatro vientos" que les gustan personas del mismo género, y que por tanto, desean construir y vivir sus vidas puede que no al lado de un hombre o una mujer que pueda ser "su media naranja", sino más en un ambiente de amor profundo a si mismo, tal y como se es.

No tengo ahora argumentos para tomar partida en la discusión entre si se nace o se hace el homosexual, a mi si me registran, alegaré que solo me acuerdo de una estrofa de una canción de Willie Colón donde "no se puede corregir a la naturaleza", seguro que no, pero también puedo decir que en el fondo hay decisiones personales detrás de tus inclinaciones sexuales, es decir, seguro que también "te haces".

Todo estos pensamientos me surgen al son de recordar a un amigo de un amigo que es homosexual, enclosetado, nacido, y hecho, para quien ese motivo de peso, bueno, en realidad son dos, son su orgullo y su papá.

Quiere ser presidente de la república y se le olvida que tener una primera dama no es un requisito constitucional para ejercer tan altos ministerios, pero cree que tenerla si es un valor agregado para ejercerlos bien. En el imaginario de lograr su comentido, creo que sabría enfrentar a los medios de comunicación, a sus colegas presidentes, a los de izquierda, a los de derecha y a las voluntades de papel; de lo que si estoy seguro es que no sería felíz si lo logra estando enclosetado.

Por otro lado, estoy casi seguro que su papá es homofóbico. He estado con él cuando su papá entre tantos cotilleos comenta acerca de hijos de sus compañeros de trabajo que "resultaron" ser maricas, ay, es que esas cosas nadie se las imagina; también, lo he visto enervado cuando ve maricas por la calle, y peor aun, cuando él corre la desgracia que le hablen, el señor se pone muy serio y se le sube la tensión.

¿Que tal con que Nicolás le dijera que es homosexual? Me da risa de imaginarme la escena, mucho mejor, de que a pesar que Nicolás es muy reservado, lo pille algun día "en cosas extrañas", el señor hasta se enferma y mas que ya anda en una edad medianamente avanzada.

No me gusta hablar con Nicolás acerca de sus inclinaciones sexuales porque lo conozco muy bien y mientras siga en el closet ninguna charla se dará con naturalidad en un ambiente plenamente sincero y de confianza, pero me dan ganas de decirle que sin dudar de sus capacidades, las probabiliades de ser presidente son muy bajas, y mas en un país históricamente gobernado por herederos del mismo círculo de "altas familias", y por otro lado, que su papá ya vivió la mayor parte de su vida y que "algún día" morira, y que si Nicolás no muere antes que él, vivirá sus años restantes no muy felíz que digamos, y para colmo de males, sin primeras damas.


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En marzo invito a muchas personas a escribir en mi blog, es la forma de celebrar el cumpleaños de este espacio. Llevo 4 cumpleaños haciendo lo mismo, llevo 5 años y medio con este blog. Todos los años recibo historias que esperan ser publicadas bajo un anónimo y a mí no se me antoja. A partir de hoy, todos los septiembres serán #SeptiembreAnónimo. En el anterior post están las instrucciones para enviar su historia. Gracias a JoJo por este impulso.

2 comentarios:

  1. Gracias por haber aceptado la invitación de publicar esta historia en tu blog Rodrigo, un fuerte abrazo.

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